Influencia de los conflictos sociales, políticos y climatológicos, en la arquitectura, el urbanismo y la forma de vida

martes, 5 de mayo de 2015

LA MUTACIÓN DE LA CRISIS: VERDE OSCURO CASI NEGRO

Hace unos años escribí un artículo titulado “Ahora somos pobres: de la transformación al urbanismo utópico”, en él, consideraba la situación actual como una gran oportunidad para la transformación; hoy, casi dos años después aún sin querer alejarme del tono optimista que impregnaba mi pensamiento, estoy empezando a observar que lo que está sucediendo puede parecerse más a una mutación que a una verdadera transformación. Realmente, ¿entendimos que “no se necesita césped para descansar en la hierba”?.
El diccionario define la palabra crisis como una situación temporal, se puede “entrar en crisis” o salir de ella, y una vez superada vuelve al estado inicial. Por eso ya es hora de que dejemos de denominar a esta situación como “crisis”; de lo que se trata es de una transformación o en el peor de los casos de una mutación del sistema social, político, económico y consciencial de la humanidad. Nada, absolutamente nada, volverá a ser como antes, esto hay que decirlo y saberlo, solo así podremos dar respuestas a preguntas del futuro.
Uno de los múltiples mensajes manipulados que se nos ofrece como “síntoma” de recuperación económica es que “el sistema financiero se mueve” que “se está empezando a dar créditos”……. es decir, "el que se hundió el primero es el que ahora decide si me da dinero a mí, habiendo sido yo el que se lo he dado a él para salvarlo"… esto además de una incongruencia es una perversión.
A lo que se quiere volver no es a la recuperación del comercio, la industria o la empresa sino, otra vez, al movimiento de dinero, el sistema bancario nos ha dicho en voz alta y sin ningún pudor que no es, como no lo fue nunca, un intermediario; que volverán a pasar por encima de gobiernos y personas.
El poder financiero lo sabe todo, sabe que las energías no son escasas y que existen adelantos tecnológicos para que sean libres y gratuitas, pero no lo divulgan porque han secuestrado a la ciencia, de cuyos adelantos no nos enteramos hasta que ellos puedan comercializar los productos para su beneficio.
Cargarse el estado de bienestar en Europa, les ha venido muy bien, de esta forma han conseguido que no sirvamos de ejemplo al resto del mundo y así controlar las migraciones.
No podemos esperar a que nuestros gobiernos hagan algo, ya que están doblegados ante el poder financiero; nosotros individualmente y en grupo podemos hacer muchas cosas
No debemos seguir siendo deudores para convertirnos en esclavos, no nos encadenemos a un préstamo o una deuda; alquilemos en lugar de comprar; cambiemos nuestras cuentas y nuestros ahorros a las bancas éticas; creemos cooperativas, bancos del tiempo, lo que sea para que se produzca un cambio de consciencia que es lo que nos pide el planeta.
Hemos de salir de esta forma de vida, no dar credibilidad a los medios de comunicación manipulados, buscar espacios para compartir, si esto lo vamos haciendo individualmente, multiplicado, crearía un gran cambio.
Ante esto no tendrán respuesta las instituciones, se les escapa de la mano.
A veces la población tiene una enorme necesidad de ser sacudida, zarandeada, con el fin de que salga de una vez por todas, de su apatía e inmovilismo y, en definitiva, de su inercia.
Dado el estado de enfermedad del conjunto de la especie humana, sólo los grandes cambios a todos los niveles, se presentan como el único remedio.

Vivamos con dignidad, no dejemos que el monstruo vuelva mutado.

"Allí delante se encuentran 
las resonantes mansiones
del dios subterráneo
guarda su entrada un terrible perro,
despiadado
y que se vale de tretas malvadas:
a los que entran les saluda alegremente
con el rabo y ambas orejas al mismo tiempo,
pero ya no les deja salir de nuevo sino que,
al acecho,
se come al que coge a punto de franquear las puertas"
Hesíodo, Teogonía, versos 693-815